El comercio electrónico está experimentando un crecimiento significativo, con un aumento del 248% en facturación en el primer semestre de 2024 en comparación con el año anterior. Sin embargo, los supermercados y comercios de barrio enfrentan una caída en las ventas, reflejando un panorama económico complicado en Argentina bajo la administración de Javier Milei.
A pesar de la mejora en los salarios, la capacidad de compra sigue afectada por la recesión. En julio, el salario de los trabajadores registrados superó la inflación, pero aún se encuentra por debajo de los niveles de 2023 y 2016. La confianza del consumidor ha permanecido estable, con un repunte en el comercio electrónico impulsado por promociones y financiamiento a través de billeteras virtuales.
Por otro lado, las ventas en supermercados han caído un 12-18% en septiembre, con datos que indican que son las más bajas desde 2017. En los comercios de barrio, donde se realiza el 70% del consumo de bienes esenciales, los precios de los alimentos han aumentado dramáticamente, lo que ha llevado a un incremento en la pobreza y la indigencia en estas áreas. En resumen, mientras el e-commerce se consolida, los comercios físicos luchan por recuperarse en un contexto de crisis económica.
