El jefe de la Policía del Chaco, comisario general Fernando Romero, confirmó este viernes al aire de Alerta Urbana que la pareja del principal sospechoso del crimen de anoche en Barranqueras tiene arresto domiciliario por una causa narco.
Por otra parte, Romero adelantó que la víctima del asesinato no era el blanco de los dsiparos ya que el autor se habría equivocado de casa ya que su objetivo sería un vecino del hombre al que mató.
“Si bien es una cuestión aparte, ella tiene prisión domiciliaria por narcotráfico”, aseguró el jefe de Policía en torno al caso de Mariela Esther Velázquez, de 35 años, detenida esta madrugada por supuesto encubrimiento ya que se negó a dar información sobre su marido, Walter Lionel Romero, principal sospechoso del homicidio y quien continúa prófugo.
El sujeto también se encuentra cumpliendo arresto domiciliario por una condena previa relacionada con la ley de estupefacientes.
Romero confirmó la detención de Velázquez por encubrimiento de homicidio y dijo que “ella sabe dónde está su pareja, pero no nos quiso mencionar el lugar”.
“Entonces la Justicia, con buen tino, ordenó el inmediato arresto de esta ciudadana”, remarcó el jefe policial.
“Cuando bajamos al domicilio del autor del hecho, nos encontramos con la con la pareja. Al interrogatorio, ella no podía no podía justificar por qué no sabía dónde estaba su marido”, agregó.
“Es una cuestión básica y lógica. Entonces, reitero, con buen tino la Justicia ordenó la detención de esta mujer», enfatizó.
Lo mataron por error
«En principio podemos decir que los disparos no eran para esta persona (por Maximiliano Sandoval, el joven de 27 años asesinado anoche a tiros en Barranqueras), sino que estaban dirigidos a otros vecinos del lugar, pero bueno, terminaron impactando lamentablemente en este sujeto”, admitió Romero.
“Quedó en el medio o recibió un impacto de arma de fuego que no era destinado para él. Eso es lo que podemos decir», enfatizó.
«En principio sabemos que eran para vecinos a tres o cuatro casas del ciudadano fallecido”, insistió.
