La relación entre Axel Kicillof y Máximo Kirchner se deteriora cada vez más dentro del peronismo de la provincia de Buenos Aires. Las recientes declaraciones de Andrés “Cuervo” Larroque, ministro bonaerense y cercano al gobernador, generaron fuerte rechazo en La Cámpora. Larroque acusó al sector de Máximo de «extorsionar» y ser «un grupo de irresponsables», señalando especialmente a figuras como Mayra Mendoza y Facundo Tignanelli.
Desde el entorno de Kirchner aseguran que Larroque actúa con aval de Kicillof y buscan provocar una ruptura. En respuesta, niegan cualquier intención de romper y acusan al gobernador de no sostener la unidad que Cristina Fernández buscó preservar.
Mientras tanto, crecen las tensiones locales con enfrentamientos entre intendentes y divisiones en bloques legislativos, lo que refleja una interna cada vez más profunda. A pesar de los llamados a la unidad, el conflicto sigue escalando y la desconfianza mutua se agrava.