La Cámara Federal de Casación Penal ratificó la condena de Cristina Fernández de Kirchner en la causa Vialidad, que incluye una pena de 6 años de prisión por defraudación al Estado y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Sin embargo, este fallo no es definitivo, ya que aún cabe la posibilidad de que la defensa recurra a la Corte Suprema de Justicia. El debate jurídico y político gira en torno a si la inhabilitación para cargos públicos impide que Cristina sea candidata en las elecciones de 2025, a pesar de que la sentencia no se haya vuelto «firme» hasta que se resuelva en el máximo tribunal.
Este fallo ha generado un cruce entre lo jurídico y lo político. El presidente Javier Milei, quien expresó públicamente su apoyo a la condena, lanzó un mensaje de «fin» al caso, pero en realidad esto solo marca el inicio de una nueva etapa judicial. Además, el antikirchnerismo busca avanzar con la ley de «Ficha Limpia», que prohibiría a los condenados por tribunales superiores presentarse a cargos electivos, y esto podría afectar directamente a Cristina si decide postularse. Si el proyecto de ley no avanza, la discusión se trasladará a los tribunales, especialmente si Cristina opta por candidatarse.
Aunque el fallo ratifica la condena por defraudación, también rechaza una acusación clave: la de asociación ilícita, lo que beneficia a Cristina en otras causas vinculadas, como Hotesur oCuadernos .
La sentencia de Casación también ha generado gestos políticos, como la visita de Cristina a Moreno, donde se reunió con militantes, lo que muestra su intención de seguir activa en la política. La Corte Suprema se convierte ahora en el próximo escenario, ya que tanto la defensa como el Ministerio Público Fiscal podrían presentar recursos extraordinarios, lo que alargaría la incertidumbre. Los rumores indican que la Corte podría rechazar el recurso de forma rápida, dejando firme el fallo de Casación y, por ende, la inhabilitación se haga efectiva.
Este escenario evoca el caso de Carlos Menem en 2017, cuando, a pesar de tener una condena por contrabando de armas, la Corte permitió que se presentara como candidato a senador. En su fallo, la Corte subrayó que la decisión tomada por la Cámara Nacional Electoral fue arbitraria, ya que no demostró adecuadamente los cambios en la jurisprudencia sobre el derecho a la revisión de sentencias penales. Este precedente podría ser relevante en el futuro si la Corte se enfrenta a un caso similar.
En conclusión, el caso Vialidad de Cristina Kirchner sigue siendo un tema candente tanto en el ámbito judicial como político. A pesar de la condena, las posibilidades de su candidatura en 2025 están en juego y dependerán de la interpretación de la inhabilitación y los recursos que puedan presentarse ante la Corte Suprema. La decisión final podría marcar un precedente importante para futuros procesos judiciales.