Un nuevo tratamiento promete ofrecer una solución innovadora y eficaz para pacientes con Parkinson avanzado. Esta terapia combina dos fármacos, foslevodopa y foscarbidopa, administrados a través de un dispositivo subcutáneo denominado «bomba VYAFUSER™». Este sistema proporciona una infusión continua de 24 horas, mejorando significativamente el control de los síntomas motores en pacientes que han dejado de responder adecuadamente a otros tratamientos. Ensayos clínicos han demostrado que esta terapia no solo reduce las fluctuaciones motoras, sino que también mejora la calidad de vida de los pacientes al mantener niveles constantes de medicación y minimizar efectos secundarios. Aunque aún no está disponible en todos los países, su éxito en varios ensayos y su adopción en Europa sugieren que podría convertirse en un estándar en el tratamiento del Parkinson avanzado.
