A partir de este lunes, la reducción de diez puntos en el impuesto PAIS comenzó a reflejarse en las listas de precios de vehículos en Argentina, con un notable ajuste en los precios de Toyota y Ford.
Toyota fue la primera en adaptar sus precios a la nueva normativa, con una reducción del 2% en los modelos fabricados en su planta de Zárate y del 4% en los autos importados desde Brasil y otros mercados. Por ejemplo, el Toyota Yaris XS 1.5 bajó de $21.205.000 a $20.357.000, y el Toyota Hilux 4×2 DC DX 2.4 pasó de $36.199.000 a $35.475.000. Los modelos importados como el Corolla y el Corolla Cross también vieron ajustes significativos.
Ford también ha respondido a la reducción del impuesto. Aunque aún no ha publicado oficialmente sus nuevos precios, se anticipa una disminución promedio del 2% en la línea Ranger fabricada en General Pacheco y una reducción del 3% en modelos importados como el Maverick y el Kuga Híbrida. El Ford Territory, importado de China, podría experimentar ajustes similares, aunque la versión Titanium puede mantener su precio actual debido a ajustes previos.
El resto de las automotrices aún no ha definido sus estrategias de precios, pero se espera que sigan el ejemplo de Toyota y Ford para no quedar desfasados en el mercado. La decisión de ajustar los precios a la baja responde a la reducción del impuesto PAIS del 17,5%, cuyo impacto en los precios finales ha sido significativo.
Hugo Belcastro, importador de BAIC y presidente de CIDOA, indicó que la reducción del impuesto ha comenzado a impactar en los precios, con ajustes que pueden llegar hasta el 8% en algunos modelos. Este ajuste busca reflejar el ahorro en los costos de importación, aunque aún no se ha anunciado compensaciones para las fábricas que ya pagaron el impuesto a la aduana. En este contexto, las decisiones de precios adoptadas por las marcas influirán en la dinámica del mercado y en la competencia entre concesionarios.
