Wanda Nara se presentó en una fiscalía de Tigre para declarar en el caso de maltrato que uno de sus hijos denunció contra su expareja, Mauro Icardi. Antes y después de su testimonio, la empresaria habló con la prensa sobre la situación legal, la revinculación de sus hijas con su padre y su estado de salud.
Ante la acusación de la abogada de Icardi, quien la calificó de “mala mujer”, Wanda respondió con firmeza, destacando su rol de madre y asegurando que está priorizando el bienestar de sus hijas. Afirmó que ha dedicado tiempo a facilitar la revinculación con su padre, pero que el proceso es complicado por las restricciones judiciales, incluidas sesiones con psicólogos y la prohibición de que ella use redes sociales durante un mes, medida que considera injusta.
La empresaria también señaló que Icardi no ha cumplido con sus obligaciones económicas como padre, asegurando que nunca le pasó dinero y que ella se hace cargo de todos los gastos de sus hijos. En redes sociales, había denunciado que su ex pareja no paga la manutención hace ocho meses.
En cuanto a su salud, Wanda confirmó que está en tratamiento por leucemia y reveló que en Fundaleu le pidieron que cierre este capítulo legal para concentrarse en su recuperación. A pesar de las múltiples presiones, aseguró sentirse acompañada por amigos y familiares.
Sobre la relación de sus hijas con Icardi, explicó que ella misma solicitó la suspensión del contacto hasta que él avance en su terapia, afirmando que sus palabras pueden dañar más que un golpe. Aunque espera que él pueda superar la situación, subrayó que lo conoce bien y anticipó cómo se desarrollaría el conflicto.
Pero, incluso desde esa vulnerabilidad, no responde con odio. Solo con una esperanza apenas sostenida: “Le deseo lo mejor. Ojalá que pueda superar esto, que rehaga su vida, que sea feliz. Lo conozco, sé que la debe estar pasando muy mal”.
Finalmente, denunció que se está haciendo cargo sola de los gastos de sus hijas y hasta de las mascotas que compartieron en Europa. Con una mezcla de dolor y determinación, concluyó que su prioridad es la estabilidad emocional de sus hijos.
